Hernia discal: tratamiento no invasivo

por | Jun 16, 2024 | quiropráctica

La hernia discal es una condición común que afecta a la columna vertebral y puede causar dolor severo, limitación de movimiento y, en algunos casos, síntomas neurológicos como parestesias o debilidad muscular.

Esta condición ocurre cuando parte del disco intervertebral se desplaza fuera de su posición normal, presionando las raíces nerviosas cercanas. La quiropráctica, conocida por su enfoque no invasivo en el tratamiento de trastornos musculoesqueléticos, ofrece una alternativa prometedora para manejar y aliviar los síntomas asociados con la hernia discal.

Qué es una hernia discal

La columna vertebral está compuesta por  vértebras, entre las cuales se encuentran los discos intervertebrales. Estos discos actúan como amortiguadores, proporcionando flexibilidad y absorbiendo los impactos durante actividades físicas o de nuestro movimiento diario. Una hernia discal se produce cuando el material gelatinoso (núcleo pulposo) del interior de un disco se rompe a través de una zona debilitada del anillo fibroso exterior, causando una protrusión o hernia discal.

Los síntomas de una hernia discal incluyen dolor intenso en la zona afectada, que puede extenderse a las extremidades si la hernia es en la columna lumbar o cervical. Parestesias en las extremidades debido a la compresión nerviosa; debilidad muscular y limitación en el rango de movimiento, especialmente al inclinarse o girar el tronco.

La Quiropráctica en el tratamiento de la hernia discal

La quiropráctica ofrece un tratamiento para la hernia discal centrado en mejorar la función mecánica de la columna vertebral y reducir la presión sobre los discos y los nervios afectados a través de ajustes espinales para restaurar el alineamiento vertebral y mejorar la movilidad.

Estos ajustes quiroprácticos pueden ayudar a reducir la presión en el disco herniado y disminuir la compresión de las raíces nerviosas.